Agarosa: un poderoso aliado de la industria cosmética

Como ya comentamos anteriormente en nuestra noticia ‘el uso del agar en cosmética’, el agar-agar lleva utilizándose en la cosmética desde hace siglos. Sin embargo, su introducción en laboratorio de investigación y desarrollo de productos cosméticos se remonta al siglo XX, cuando comenzó a utilizarse los extractos derivados de las algas para la fabricación de jabones, champú y otros tipos de productos de aseo. 

Su aplicación tuvo un gran éxito gracias a las beneficiosas propiedades que aportaban las algas: sales minerales, aminoácidos y un alto contenido de oligoelementos. El consumidor apreciaba el buen aspecto de su piel y cómo esta absorbía fácilmente sin problemas estos productos. 

Las propiedades gelificantes y estabilizantes, sin incorporar grasa al producto ni resulta tóxico ni irritables para las células cutáneas, ha convertido al agar en un ingrediente ventajoso para la industria. 

Además, la agarosa que extraemos por medio de la purificación del agar se ha convertido también en un aliado de la manufactura de productos estéticos, actuando principalmente su gel como agente de relleno. Por ejemplo, es utilizado en tratamientos de rejuvenecimiento fácil. 

Diferentes compañías del mundo de la estética destacan las propiedades de los geles de agarosa y basan los buenos resultados que obtienen en que es un material con alto contenido en agua, 100% natural, biocompatible y biodegradable. Otra característica importante que destacan de los geles de agarosa es que como agente de relleno no migra y mantiene bien su forma, integrándose de forma estable en los tejidos. Este gel de relleno subdérmico es fácil de manejar por los expertos y resulta menos doloroso para el paciente, reduciendo la formación de hematomas y la inflamación.